miércoles, 31 de agosto de 2011

Comunicación empática

Comunicación no violenta (CNV) es un modelo desarrollado por Marshall Rosenberg que busca que las personas se comuniquen entre sí de manera efectiva y con empatía. Enfatiza la importancia de expresar con claridad observaciones, sentimientos, necesidades y peticiones a los demás de un modo que evite el lenguaje evaluativo que etiquete o defina a los interlocutores o a terceros.

Los que usan comunicación no violenta (también llamada "comunicación empática") consideran que todas las acciones se originan en un intento de satisfacer necesidades humanas, pero tratan de hacerlo evitando el uso del miedo, la culpa, la vergüenza, la acusación, la coerción y las amenazas. El ideal de la CNV es que las propias necesidades, deseos, anhelos, esperanzas no se satisfagan a costa de otra persona. Un principio clave de la comunicación no violenta que facilita esto es la capacidad de expresarse sin usar juicios sobre lo que está bien o mal, sobre lo que es correcto o incorrecto, por eso se hace hincapié en expresar sentimientos y necesidades, en lugar de críticas o juicios morales.

Rosenberg, formado como psicólogo clínico, ha aplicado el modelo de Comunicación No Violenta en programas de paz en Ruanda, Burundi, Nigeria, Malasia, Indonesia, Sri Lanka, Medio Oriente, Serbia, Croacia, e Irlanda. La teoría tiene mucho en común con conceptos usados en mediación y resolución de conflictos y es usada por algunos mediadores en su trabajo.

Rosenberg eligió el nombre comunicación "no violenta" para referirse a la filosofía de Gandhi del ahimsa o no violencia, sin embargo, a diferencia de Gandhi, Rosenberg aprueba el uso protector de la fuerza —el uso de la fuerza para evitar heridas, pero no con un sentido punitivo—, es decir, está en contra de aplicar una fuerza con la intención de castigar o dañar a alguien por un hecho pasado. Rosenberg afirma que el deseo de castigar y el uso de medidas punitivas sólo existen en culturas que tienen visiones moralistas del mundo, las que piensan en categorías de bueno/malo, correcto/incorrecto. Señala que los antropólogos han descubierto culturas en muchas partes del mundo en que la idea de que alguien sea "malo" carece de sentido y que tales culturas tienden a ser más pacíficas.

Fuente: internet

martes, 30 de agosto de 2011

Paz, Shalom, Salam...

A 12 años de la Pascua de Dom Hélder Câmara, una oración suya. Algunas cosas que nunca debe dejar de lado un militante del Reino...

¡Ven señor!
No sonrías diciendo que ya estás entre nosotros.
Son millones los que no te conocen todavía.
¿Y de qué sirve el conocerte?
¿para qué tu venida, si para los tuyos la vida prosigue como si tal cosa?
¡conviértenos! ¡sacúdenos!
Que tu mensaje se haga carne en nuestra carne,
Sangre de nuestra sangre, razón de nuestra vida.
Que nos arranque de la tranquilidad de la buena conciencia,
Que sea exigente, incómodo,
Porque no es otro el precio que hemos de pagar
Para alcanzar la paz profunda,
La paz diferente: tu paz.

viernes, 26 de agosto de 2011

linda memoria: Tissera Vida y obra

Somos pueblo: Entrevista al padre pablo tissera

Dialogar: ser humanos

IV Simposio Judeo Cristiano
Los jóvenes y sus experiencias
Por: Soledad Fattori / Alberto Barlocci

Durante el simposio un grupo de jóvenes reflexionó sobre qué significa para ellos el diálogo. Lo interesante de estas ponencias fue el diferente origen de cada uno.

A las intervenciones de los argentinos Elena López-Ruf, Cinthya Cargnelutti y Uriel Erlich se sumaron las de Jessica Sacks, Inbal Freund y Lásló Berényi, que provienen de distintos lugares pero viven en Israel.
Todo partieron de tres interrogantes: ¿Qué es el diálogo?; ¿Cómo es su experiencia personal al respecto? ¿Cuáles son los desafíos que plantea?

Elena López-Ruf y Cinthya Cargnelutti, representantes del los Focolares, relataron su participación en diversas actividades interreligiosas en Córdoba y en Buenos Aires, mientras que Uriel Erlich hizo alusión a sus vivencias en la Mesa del Diálogo Argentino, espacio que se abrió en nuestro país durante la crisis de 2002 para fijar pautas de bien común entre todos los sectores de la sociedad. Estas experiencias abrieron en cada uno sensibilidades y perspectivas que no habían tenido hasta ese momento.

Minoría de minorías

Jessica Sacks, nacida en Londres en el seno de una familia ortodoxa judía muy involucrada en el diálogo interreligioso. Hasta los seis años cursó en un colegio hebreo, pero no ortodoxo, y a los once comenzó a asistir a un establecimiento laico aunque netamente de mujeres. Ella siempre se sintió parte de una minoría. Desde chica porque era una de las pocas religiosas de su clase, en su adolescencia por ser judía.

Finalmente se mudó a Jerusalén: “Allí, por primera vez en mi vida, no me sentí una minoría”, dice al respecto, pero se encontró con una ciudad dividida, donde unos no se hablan con los otros por miedo a conocerse. Entonces, concluye con una reflexión: “Hay muchas heridas que nos separan. No sé cómo podremos curarlas, pero debemos trabajar para hacerlo, porque si lo logramos llegaremos a hablar ‘con’ los demás y no ‘de’ los demás.”

Un instrumento para construir amistades

Lásló Berényi es católico. Nació en Hungría, estudió Teología y Filosofía en Roma, y decidió seguir su camino académico en Jerusalén, buscando responder a una pregunta que tenía muy dentro suyo ¿Quién era Dios para él? Fue entonces que descubrió, al estudiar los textos hebraicos, que significaba Dios para los otros con quienes compartía ahora el día a día.

En una oportunidad un profesor le propuso hablar sobre el catolicismo ante otros académicos. Pensando en lo duro que sería el encuentro se armó con muchas respuestas como para ir al ataque. Sin embargo, cuando llegó el momento encontró una actitud de apertura de parte de sus interlocutores: no lo esperaban para una batalla sino para escucharlo, para entrar en él y comprenderlo. Esto significó un cambio profundo para él: “Fue un descubrimiento intelectual, el diálogo ya no significaba más algo abstracto sino algo muy concreto: un instrumento que permite construir amistades”.

Comer juntos también acerca el alma

Inbald Freund se presenta como una judía “proveniente de una familia normal, hija de aquellos que construyeron el Estado de Israel”. Su experiencia de diálogo tuvo que ver con una comida. Se hallaba en un congreso donde la mayoría de los participantes eran cristianos y había tan sólo un par de musulmanes y hebreos. A la hora de la recepción pasaron a un salón donde había muchas mesas y, en una pequeña esquina, dos reservadas con platos que se anunciaban preparados según la tradición hebrea y musulmana.

Sin embargo, y por precaución, Inbald consultó a los cocineros por los cuidados tenidos en cuenta para su elaboración y se encontró con que no había sido suficiente: ningunas de esas preparaciones cumplían rigurosamente con sus preceptos. Finalmente, y luego de conseguir quien le proveyera comida según los criterios “kosher” de los judíos, notó que los musulmanes seguían teniendo inconvenientes en cuanto a la elaboración de esos platos.

Como resultado decidieron ayudarse unos con otros para que todos pudieran comer. De esta manera descubrió que en esas “pequeñas mesas que nos dejaban en la esquina especialmente para nosotros nacieron amistades impensadas entre judíos y musulmanes”, algo que nunca se hubiese esperado.

Conocernos para conocer a los otros

Hana Bendcowsky trabaja en el Centro de Jerusalén para la Organización Judeo Cristiana, una entidad que busca acercar a las escuelas de ambas religiones mediante programas conjuntos. Con una metodología que se basa en el autoconocimiento como requisito imprescindible para conocer al otro, se organizan programas en los cuales chicos de entre 9 y 12 años de diferentes religiones intercambian conocimientos y tradiciones buscando establecer lazos y relaciones.

El resultado es algo que se diría casi imposible en Medio Oriente: que alumnos de una escuela cristiana entren en un colegio judío y viceversa. “No es fácil - aclara Hana- pero lo importante para nosotros es llegar a estos jóvenes para que se conozcan entre si y se comuniquen”.

Fuente: Ciudad Nueva

viernes, 19 de agosto de 2011

CONCLUSIONES DEL INFORME FINAL DE LA COMISION DE LA VERDAD PARTE 3

CONCLUSIONES DEL INFORME FINAL DE LA COMISION DE LA VERDAD PARTE 2

CONCLUSIONES DEL INFORME FINAL DE LA COMISION DE LA VERDAD PARTE 1

Reflexiones sobre la tragedia de Noruega

Durante la segunda mitad de julio fui a pasar mis vacaciones de verano a mi Noruega natal para visitar a mi familia, a ex colegas y a otros amigos. Por casualidad, mis viajes me llevaron a Oslo el 22 de julio. Cuando salía de la ciudad, escuché la terrible noticia de las muertes en la capital y en el campamento de jóvenes en la isla de Utøya.

Como muchos noruegos, conocía a algunas de las víctimas y a sus afligidas familias. Uno de los que fueron asesinados en Utøya era hijo de un oficial noruego que había venido a visitarme pocos meses antes al Consejo Mundial de Iglesias en Ginebra. Como muchos noruegos aun estoy luchando para tomar conciencia de que ese hecho realmente ocurrió.

El hombre que ha confesado ser el autor de la matanza insiste en que actuó en defensa de la “cultura cristiana”. Ha adoptado una actitud según la cual las “civilizaciones” diferentes tienen que entrar en conflicto inevitablemente. Está equivocado y es penalmente responsable.

En una respuesta pastoral conjunta a la tragedia del 22 de julio, las iglesias de Noruega han expuesto lo que significa encarnar una cultura genuinamente cristiana y actuar conforme a los verdaderos valores cristianos. Las iglesias trabajan en colaboración y en espíritu de solidaridad con representantes de otras religiones. El pueblo de Noruega está demostrando que una respuesta noviolenta a la violencia es la respuesta más pujante y más valiente que se pueda dar.

Una imagen que vuelve a mi mente una y otra vez es la del pastor cristiano y el imam musulmán de pie uno al lado del otro en el funeral de las jóvenes víctimas de la violencia. Esa imagen ha sido publicada y difundida por los medios de comunicación a nivel internacional. Ha llegado a ser un símbolo casi icónico de la determinación de construir una sociedad sostenible, solícita, abierta - juntos. Muchas personas de muchas naciones me han dicho que se han sentido profundamente estimulados por el pueblo de Noruega, cualquiera que sea su origen, por su respuesta comunal positiva al terror a pesar del dolor que les inflige.

Como iglesias, estamos comprometidas a trabajar juntas por la paz justa. Eso significa esforzarse por edificar sociedades abiertas en las que las personas de todos los grupos son tratadas como seres humanos con sus derechos y sus deberes, y en las que el comportamiento injusto y pecador es condenado. Tenemos que interrogarnos a nosotros mismos, a nuestra conciencia, - acerca de lo que decimos y lo que no decimos – y continuar en diálogo con nuestros prójimos.

En tiempos como estos, estamos llamados a reflexionar sobre el impacto del valor cristiano más fundamental: el mandamiento de amar a nuestro prójimo. Comprobamos cuán necesario es seguir ese mandamiento en tiempos de dolor y de muerte. Percibimos la importancia del abrazo mutuo de amor y respeto entre todos nosotros. Percibimos cuán necesario es el mandamiento de amor cuando hacemos frente con honestidad a los profundos desafíos que entrañan los cambios en las pautas de inmigración y una sociedad cada vez más plurirreligiosa.

Para todos nosotros, la catástrofe del 22 de julio sirve de terrible advertencia.

(*) El Dr. Olav Fykse Tveit es el secretario general del Consejo Mundial de Iglesias y pastor ordenado de la Iglesia de Noruega.

domingo, 14 de agosto de 2011

Raimon Panikkar - La pace e il perdono

La locura del amor: San Maximiliano Kolbe


San Maximiliano María Kolbe O.F.M. (Zduńska Wola, Polonia, 8 de enero de 1894 - Auschwitz, 14 de agosto de 1941) Fraile franciscano conventual polaco.
En 1927 fundó en Polonia a 40 km de Varsovia, la Ciudad de la Inmaculada (Niepokalanów), un lugar que alojaba una organización que tuvo mucho éxito y expansión.

Durante la Segunda guerra mundial, los nazis invadieron Polonia y bombardearon la Ciudad de la Inmaculada, llevándose prisionero al padre Maximiliano y a todos sus colaboradores. Él había fundado una radiodifusora y estaba dirigiendo la revista El Caballero de la Inmaculada. Todo se lo destruyó la guerra. Fue llevado al campo de exterminio de Auschwitz, donde se le adjudicó el número 16.670.

A fines de julio de 1941 se fugó un preso del campo de concentración de Auschwitz.

El sargento polaco Franciszek Gajowniczek, por entonces de 40 años de edad, uno de los prisioneros, narró así su experiencia de aquel verano de 1941:

Yo era un veterano en el campo de Auschwitz; tenía en mi brazo tatuado el número de inscripción: 5659. Una noche, al pasar los guardianes lista, uno de nuestros compañeros no respondió cuando leyeron su nombre. Se dio al punto la alarma: los oficiales del campo desplegaron todos los dispositivos de seguridad; salieron patrullas por los alrededores. Aquella noche nos fuimos angustiados a nuestros barracones. Los dos mil internados en nuestro pabellón sabíamos que nuestra alternativa era bien trágica; si no lograban dar con el escapado, acabarían con diez de nosotros. A la mañana siguiente nos hicieron formar a todos los dos mil y nos tuvieron en posición de firmes desde las primeras horas hasta el mediodía. Nuestros cuerpos estaban debilitados al máximo por el trabajo y la escasísima alimentación. Muchos del grupo caían exánimes bajo aquel sol implacable. Hacia las tres nos dieron algo de comer y volvimos a la posición de firmes hasta la noche. El coronel Fritsch volvió a pasar lista y anunció que diez de nosotros seríamos ajusticiados.

A la mañana siguiente, Gajowniczek fue uno de los diez elegidos por el coronel de las SS Karl Fritsch para ser ajusticiados en represalia por el escapado. Cuando Franciszek salió de su fila, después de haber sido señalado por el coronel, musitó estas palabras: «Pobre esposa mía; pobres hijos míos». El P. Maximiliano estaba cerca y las oyó. Enseguida, dio un paso adelante y le dijo al coronel: «Soy un sacerdote católico polaco, estoy ya viejo. Querría ocupar el puesto de ese hombre que tiene esposa e hijos» El oficial nazi, aunque irritado, finalmente aceptó su ofrecimiento y Maximiliano Kolbe, que tenía entonces 47 años, fue puesto, junto con otros nueve prisioneros, en ayuno obligado para que muriera. Los diez condenados fueron recluidos en una celda subterránea el 31 de julio de 1941.
Pero como —tras padecer tres semanas de hambre extrema— el 14 de agosto de 1941 aún sobrevivía junto a otros tres condenados y los oficiales a cargo del campo querían dar otro destino a la celda, Kolbe y sus tres compañeros de celda fueron asesinados administrándoles una inyección de fenol. Los cuerpos fueron incinerados en el crematorio del campo. Incluso en prisión y también en la celda de hambre, celebró, mientras pudo, todos los días la Santa Misa, distribuyendo la Comunión a otros prisioneros.

El papa Pablo VI lo declaró beato en 1971; a la fiesta asistió Franciszek Gajowniczek (de 70 años), el hombre por el cual Kolbe había ofrendado su propia vida treinta años atrás. Once años después, Juan Pablo II canonizó a éste ante una multitud de polacos, el 10 de octubre de 1982. Posteriormente fue nombrado patrón de los radioaficionados a petición de los radioaficionados polacos

San Maximiliano Kolbe ha inspirado a algunos a vivir lo que otros han llamado «la locura del amor». Con su nombre se bautizó la denominada «Operación Kolbe» (2007), una iniciativa ecuménica de relevo de personas secuestradas en Colombia, país en el que en 2011 permanecen cautivas más de cuatro mil personas. El propósito de esta operación es reunir voluntarios que se ofrezcan como relevo, para que cada uno de ellos tome, eventualmente, el lugar de una persona secuestrada. El grupo está conformado, en su mayoría, por sacerdotes de distintas congregaciones, pero cuenta con un 40 por ciento de laicos, la mayoría profesionales mayores de 40 años; la iniciativa nació de la base de la Iglesia. Sus integrantes están dispuestos, en forma libre, autónoma y anónima, a asumir el cautiverio a cambio de la libertad de uno de los secuestrados: así interpretan y se proponen responder como Maximiliano Kolbe al llamado de Jesús en las Sagradas Escrituras: «Nadie tiene mayor amor que el que da la vida por sus amigos».


jueves, 11 de agosto de 2011

La respuesta es el amor - Madre Teresa de Calcuta


Cualquiera sea la pregunta, la respuesta es el amor.
Cualquiera sea el problema, la respuesta es el amor.
Cualquiera sea la enfermedad, la respuesta es el amor.
Cualquiera sea el dolor, la respuesta es el amor.
Cualquiera sea el miedo, la respuesta es el amor.
El amor es la respuesta, porque el amor es lo único que existe.

El asombroso poder del abrazo humano

Highlights of the IEPC opening prayer service

Vivir los latidos del mundo. Por Juan Arias. Brasil.



Un amigo me confiesa: "En vacaciones no voy a leer ni un periódico, ni siquiera voy a abrir Internet. Quiero desintoxicarme". No son pocos los que en algún momento caen en la tentación -siempre vencida por suerte- de dejar de leer periódicos, cualquiera que sea su soporte. "Es que mi hígado no resiste tanta locura de noticias. Mejor saber menos de lo que ocurre en el mundo", dicen algunos. Negarnos a estar informados por miedo a sufrir es declarar nuestra derrota ante la vida.

A veces, es cierto, puede ser una terapia alejarse del bombardeo informativo cada vez más poderoso, más planetario y más repleto de atrocidades. La última la leo aquí en Brasil: un joven mata a su padre y a su madre, encierra sus cuerpos en un armario y da una fiesta para 60 amigos. Hoy crece el interés por la introspección, por la meditación, por el encuentro con nuestro propio ser.

Y sin embargo, estoy convencido de que el mundo con todos sus horrores es hoy mejor que hace solo cien años. Y estoy convencido de que lo es precisamente por esa "maldita" información que se nos cuela cada vez más por las ventanas de nuestra vida. Con los ojos cerrados al mundo, este se degradaría aún más. Luz y taquígrafos, que se decía hace tiempo -hoy diríamos, luz e Internet-, son el mejor remedio a la barbarie, a los abusos del poder, a los atropellos a los más débiles. Por eso, todos los déspotas del mundo, odian la libertad de expresión.

Curiosamente -quizás por la deformación de mis estudios de Psicología- he visto siempre a la información como una de las mejores terapias para ser menos infelices. No me refiero, por ejemplo, a la terapia de un amigo que, tras años de horror en un campo nazi, sentía miedo de la muerte y usaba el periódico para, al leer las necrológicas, sentir el gusto de seguir aún vivo un día más.

Se trata de algo más serio. Hay quien al abrir los ojos cada mañana acude a un pensamiento positivo que le ayude a llevar mejor la dura tarea del día, o quien recita una plegaria o un mantra o acude a algún resorte espiritual. Y hay quien no se sentiría a gusto sin poder abrir el periódico -en el soporte que sea- mientras desayuna.

Yo soy uno de esos. Llevo más de 40 años, acostándome y despertándome con el latido del mundo, con la última noticia.

Leí de joven que el escritor francés y Nobel de Literatura François Mauriac decía que "la lectura matinal del periódico era la oración del hombre laico".

Se puede vivir sin saber nada de los otros, encerrado en el propio cascarón, aunque además de aburrido debe resultar de una pobreza existencial sin nombre. Es verdad que al abrir el periódico o al bucear en la Red, corremos el peligro de desayunarnos con las lágrimas de angustia del mundo que llegan hasta la taza humeante de café. Es verdad que a veces se nos congelará el alma al descubrir que somos más demonios que ángeles, todos, los humanos.

Pero también es verdad que cerrando los ojos a esas lágrimas, a esos horrores, nos convertiremos cada vez más en trozos de mármol, incapaces de llorar con los que lloran y de ser felices con los que consiguen serlo.

Un filósofo me decía que envejece solo "el que pierde la capacidad de sorprenderse". ¿Y qué es la noticia, hacha o flor, sino la sorpresa que el mundo nos brinda a través de la información?

Sufrirá nuestro corazón con la noticia que espanta y gozará con el descubrimiento científico que salvará miles de vidas. No existen periódicos que solo publiquen noticias buenas -todos acabaron fracasando- porque la vida no es así. Es a veces benigna y a veces cruel, pero cada uno de los otros, que llora o ríe es una célula nuestra y si no nos hace vibrar, estamos muertos.

La vida, a pesar de que avanza siempre hacia mejor -¿pueden compararse las actuales crisis financieras de Europa, con las dos grandes guerras mundiales que sembraron al continente de millones de muertos hace tan poco tiempo?-, siempre estará amasada de dolor y de gloria. Negarnos a estar informados por miedo a sufrir es declarar nuestra derrota ante la vida, es negarnos a aceptarnos.

Puede hasta tener una apariencia de felicidad cambiar el periódico con su porción de sangre y de terror por una cerveza y unos boquerones fritos tumbados en la playa, pero al final de la ausencia provocada de noticias nos esperará solo el desencanto del egoísmo, el de aquel que creó el horrible refrán popular, "ojos que no ven corazón que no siente".

Mejor mancharnos de dolor o de disgusto con la lectura del periódico que vivir ciegos y con el corazón arrugado. ¿Para qué un corazón incapaz de latir con los latidos del mundo?

Aquel profeta judío, que conocía bien el alma humana, pronunció una de las frases más enigmáticas de la historia: "Dejad que los muertos entierren a los muertos". A él le interesaban los vivos, a veces crueles -a él le clavaron en un madero-, a veces sublimes.

Pienso en Gandhi, Luther King, Mandela y millones de anónimos capaces de morir por los demás. Los muertos no nos dan miedo. Somos los vivos los que damos miedo, pero así somos, no como nos gustaría a veces ser, sino como somos de verdad.

La noticia, ayer del periódico de la mañana, hoy de cada instante, es el mejor espejo de nuestra propia alma. No sirve darle la vuelta o quebrarlo. Sus añicos acabarán manchándonos igualmente de sangre.

Fuente: El Arca digital

martes, 9 de agosto de 2011

Orar en El Silencio del Corazón. Hermano Roger, Comunidad de Taizé

“Dios de paz,

aunque seamos frágiles,

querríamos seguirte

por el camino que nos conduce

a amar como Tú nos amas”.

“Dios de misericordia,

Tú iluminas nuestras almas

con una luz inesperada.

Entonces descubrimos que,

aunque pueda permanecer en nosotros

una parte de oscuridad,

en cada uno habita sobre todo,

el misterio de tu presencia”

“Dios de consolación,

por tu Espíritu Santo

vienes a transfigurar nuestro corazón.

Incluso en nuestras pruebas

haces crecer

la comunión contigo”.

domingo, 7 de agosto de 2011

Encuentro entre "diferentes". Testimonio de Taizé

Tras tres meses de vida y trabajo aquí en la Comunidad de Taizé entre personas de muchas nacionalidades y orígenes, he podido experimentar ese miedo a la “diferencia”, pero también la belleza del encuentro con nuevas personas. A menudo mi miedo es a lo desconocido, miedo a no comprender por qué las personas actúan de una cierta forma, intentando clasificar todas las situaciones basándome en lo que yo conozco.

Es más fácil para mí no ir al encuentro del otro y así evitar la posibilidad de sentirme herido o rechazado. No obstante, aún si esto pudiera parecerme una opción más segura y fácil, ¡también es muy solitaria! Salir al encuentro de los demás, intentar comprenderlos, trabajar y vivir con ellos, requiere valor, perseverancia y esfuerzo. Requiere que cambie mi forma de razonar de: "así lo he hecho siempre, así que debe estar bien", a aceptar que hay muchas formas de alcanzar el mismo objetivo. Incluso si la manera de lograr este objetivo es más lenta y más difícil al trabajar con otros, es algo que forma parte de la vida en comunidad y una oportunidad para mí de encontrar y conectar con otras personas en mi entorno.

Fuente: Boletín de Taizé

viernes, 5 de agosto de 2011

De Víctor Hugo

"El futuro tiene muchos nombres:

Para los débiles es lo inalcanzable.

Para los temerosos, lo desconocido.

Para los valientes es la oportunidad"

Todo en la vida es oportunidad y riesgo. Abrazamos la oportunidad y asumimos el riesgo. Sin miedo, que paraliza y empobrece. Con prudencia respetuosa de los
sentimientos,la vida y la libertad propias y del otro con el que nos comunicamos.

jueves, 4 de agosto de 2011

4 de agosto: Memoria de Monseñor Angelelli

“¡Qué difícil es ser cristiano! Porque al cristiano se le exige perdonar. Si se nos dijera: “No tenemos que perdonar, esto no es cristiano, no es siquiera humano matar sacerdotes” responderíamos sin vacilar: el cristiano tiene que perdonar a todos. Pero otra cosa es aprobar los errores y otra aún no trabajar para evitar que estas cosas sucedan. …No se acuerdan que Tertuliano dice que la sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos? Así, los mismos verdugos son instrumentos, en cierta manera, para el bien, para que surja una comunidad fuerte en la fe, en la esperanza y en el amor. Seremos felices si Dios los perdona y queremos que se hayan dado cuenta de lo que han hecho. Esperamos también que aquellos que han usado su inteligencia en este crimen la vean iluminada con la verdad. Y rogamos que lo que han maquinado Dios no permita que crean que lo han hecho en al hombre de la fe; ello sería una aberración. Nosotros, perdonemos y pidamos al Señor que los perdone.”

Monseñor Angelelli. De la homilía en la misa por los asesinados Carlos de Dios Murias y Gabriel Longueville

Oslo advierto - Marcelo Polakoff

a luz (o mejor dicho “a las tinieblas”) de lo sucedido en Oslo, gracias a la masacre producida por Anders Behring Breivik, les hago entrega –a modo de interesadísima contribución– del siguiente “Manual de futuras tragedias”, con el único fin de no volver a lamentarlas.

1. Siéntase el único elegido o siga de manera ciega a quien así se defina a sí mismo.

2. Reniegue de todo argumento lógico, por más que así suene a sus oídos y que considere que pueda llegar a resquebrajar sus creencias. Es más, lo ideal es tratarlo como la reacción obvia y esperable que requiere su propio e inmaculado ideal.

3. Haga de ese ideal o verdad con mayúsculas el único objetivo de su vida y adapte todo razonamiento, circunstancia y explicación a él. De hecho, sería incluso ideal que ese “ideal” fuera la paz, la justicia o algo similar, pues, ¿quién podría decirle que está equivocado?

4. Recuerde que siempre debe ajustarse a un solo ideal, así el resto no lo distrae. Por ende, si su verdad –por ejemplo– es la paz, ¡al diablo con la justicia si se interpone en su camino!

5. Si combina ese ideal con un aditamento religioso, mucho mejor. Sentirá que Dios está de su lado. Ponga atención a este elemento: lo que diga el resto de los mortales no tiene sentido. Usted (su líder o sus compañeros) son los únicos intérpretes válidos de la palabra divina.

6. Aléjese de toda persona, organización y actividad que apunte al diálogo, al pluralismo y a la aceptación de verdades múltiples coexistentes. Defínalas como “excremento”.

7. Aborrezca cualquier religión o creencia que no sea la suya. Y más aun a sus seguidores.

8. Siéntase amenazado permanentemente. Casi todos están en su contra, ya sea por celos, ignorancia, ingenuidad o por pura maldad.

9. Échele la culpa de todos los males de su sociedad a algún grupo específico de personas y, aunque parezca irrisorio que eso fuera cierto, insista hasta el infinito en su diatriba. Para este inciso elija (si le es posible) a algún grupo que ya haya sido maltratado en algún otro lugar, pues eso le dará amplias ventajas a la hora de condenarlos.

10. Comience por ataques anónimos y masivos, y primero sólo a través de la palabra.

11. Utilice las bondades de los medios masivos de comunicación, en especial Internet, para propagar sus advertencias.

12. No se quede ahí: la palabra es una herramienta con la que trabajan únicamente los débiles de espíritu; súmele la acción directa.

13. Capacítese al respecto. Puede ser con armamento, explosivos, venenos. No escatime nada con tal de llegar a sus fines.

14. Esté dispuesto a perderlo todo, incluso su vida, que por supuesto –al igual que la de los demás– es completamente secundaria frente a la grandeza absoluta de su ideal.

15. Si en el camino a este tipo de acciones, sus seres queridos tratan de disuadirlo a través de mensajes contradictorios que incluyen llamados a la conciencia, a la piedad, al respeto por el prójimo y demás “mariconadas”, redoble su lucha y convénzalos de sus errores. Si no lo logra y siguen insistiendo, aléjese raudamente de ellos y corte cuanto vínculo sea necesario. Tarde o temprano lo entenderán, se lo agradecerán y le pedirán perdón por semejante falta de visión.

16. Cuanto más solo circule, mejor. Déjese acompañar, si le hace falta, por sus pares. Nadie más. El resto es una pérdida de tiempo.

17. Sueñe en grande. Las cosas no se hacen de a poco ni de manera paulatina.

18. Y quédese tranquilo: su nombre indudablemente será recordado.

No debe ser casual que cuando se mencionan personas de la calaña de aquel noruego (o similares), en la tradición judía se acostumbre agregar en hebreo imaj shemó , cuya traducción es “que su nombre sea borrado”.

Que la memoria y los nombres de cada una de sus 76 víctimas sean una nueva advertencia para todos quienes nos seguimos considerando sus sobrevivientes.

Fuente: La Voz del Interior

miércoles, 3 de agosto de 2011

Para el debate: Cristianos de la república (España)

Un monje de la abadía de Montserrat,Hilari Raguer, historiador, ha puesto de manifiesto la escasa memoria histórica de la Iglesia española acerca de los cristianos que estuvieron al lado de la República o compartieron sólo la suerte de su pueblo, mientras no cesa de elevar a los altares a centenares de víctimas de la otra parte.

Profesar la fe crristiana en la zona republicana era difícil, poco menos que heroico y hasta llegó a ser un delito. El monje refiere que un periodista católico, historiador también, Daniel Arasa ha dado a conocer recientemente un gran elenco de los que llama "católicos del bando rojo".

Limitándonos a los que fueron partidarios de la República o de los que al menos criticaron la represión franquista, es digno de recordar el caso de un político cristiano, Carrasco i Formiguera. Cuando fue apresado en el barco en que viajaba con su esposa y seis hijos, el político fue llevado a la cárcel provincial de Burgos, su mujer con la niña pequeña y su nodriza a la cárcel de mujeres de la misma ciudad, y los demás hijos a San Sebastian, las dos mayores de 20 y 18 años a una cárcel de mujeres y los tres pequeños de 13, 11 y 9 años a un orfelinato convertido en cárcel de rehenes.

Este caso es un claro ejemplo de aquella tercera España que no cabía ni en la roja ni en la blanca. Como todo su partido, Unió Democrática de Catalunya, Carrasco reprobó el alzamiento y colaboró con la Generalitat, como técnico de la consejería de Finanzas, regida por Martí Esteve y después por J. Tarradellas, fue amenazado de muerte por los anarquistas por su condición de católico y defensor de la Iglesia y de los jesuitas. Al fin fue fusilado por orden de Franco, a pesar de la intercesión del cardenal Gomá y de la Santa Sede por medio del nuncio Antoniutti.

Ante este panorama es lógico que fuese criticada la carta colectiva del episcopado español de 1º de julio de 1937, redactada por el cardenal Gomá, entre otras razones, la más grave es que absuelve la represión franquista. Por este motivo el obispo de Vitoria, Mateo Múgica, se negó a firmarla, explicándolo a la Santa Sede en estos términos:

"Según el episcopado español, en la España de Franco la justicia es bien administrada, y esto no es verdad. Yo tengo muchísimas listas de cristianos fervorosos y de sacerdotes ejemplares asesinados impunemente sin juicio y sin ninguna formalidad jurídica".

Fray Gumersindo de Estella, según el estudio de Hilari Raguer, refiere en sus patéticas memorias la gran cantidad de personas fusiladas tras un simulacro de juicio. La pastoral de los condenados a muerte es otro de los aspectos más negros de la actitud de la Iglesia española ante la represión de la guerra y la primera posguerra. Eran constantes los insultos que dirigían los capellanes a los presos en los sermones que obligatoriamente tenían que escuchar. Fray Gumersindo no los podía salvar, pero los trataba con respeto y compasión.

Si en la España republicana hubo mártires, en la llamada España nacional abundaron los confesores. Es igualmente éste un aspecto negativo de la pastoral, porque no había preocupación por la vida de los condenados, pero sí por su sacramentalización. El biógrafo del general Yagüe asegura que el militar lamentaba las sentencias de muerte que se veía obligado a dictar, pero procuraba que los reos se confesaran antes de la ejecución.

Otro testimonio de las muchas ejecuciones cometidas sin respeto a la vida lo da el padre Fernández Regatillo S.J., el famoso moralista y canonista de entonces, cuando se plantea el tema de la extremaunción, porque este sacramento está destinado a los enfermos a punto de morir y los condenados no son enfermos. Dice así:

"Es cuestión de suma actualidad, pues por cientos se cuentan los condenados a la máxima pena por los tribunales militares; y son ajusticiados comúnmente por fusilamiento; y los reos de más graves y numerosos crímenes por la horca o a garrote".

Fuente:Iglesia Viva nº 241 Revista de pensamiento cristiano

¿Cómo respondieron a la violencia Gandhi, L. King, Mandela y Teresa de Calcuta? - Urbano Sánchez García

Gandhi, conocido como el Mahatma (Grande) (1869-1948)
Gandhi, el político, filósofo y místico, afrontó la violencia de la discriminación de los hindúes en Sudáfrica, la injusticia de la dominación británica y las luchas entre hindúes e islámicos. Él empezó un programa de resistencia pasiva, desobediencia civil y boicot a los productos británicos. Proclamó la "desobediencia civil" a las instituciones británicas, tribunales y escuelas, para manifestar su desacuerdo con las leyes que castigaban delitos revolucionarios. Pero sin violencia porque afirmó: "quisiera sufrir todas las humillaciones, todas las torturas, el ostracismo absoluto y hasta la muerte, para impedir la violencia." “La humanidad no puede liberarse de la violencia más que por medio de la no-violencia”. “La verdad es el objetivo, el amor el medio para llegar a ella”.
Bajo la influencia de la idea de la “a-himsá”, del espíritu del Sermón de la Montaña (de Jesucristo, la resistencia pasiva), y de las enseñanzas del escritor ruso León Tolstoi, dio forma e inició su política de "resistencia pacífica" en contra de las leyes injustas. Literalmente "a-himsá" significa no-violencia. En la tradición religiosa hindú el término adquirió el significado positivo de bondad, caridad y amor por todos los seres y, en este sentido, lo usó Gandhi.
El promotor de la paz entre hindúes y musulmanes murió víctima de la violencia, asesinado por un extremista hindú. Nunca llegó a recibir el premio Nóbel de la Paz aunque fuera nominado cinco veces. Era una persona profundamente ascética y religiosa que murió diciendo Hey Rama, “Oh Dios”.

Luter King (1929 -1968)
El pastor baptista estadounidense, defensor de los derechos civiles, desde joven, tomó conciencia de la situación de segregación social y racial que vivían los negros de su país, y en especial, los de los estados sureños. Muy pronto dio muestras de su carisma y de su firme decisión de luchar por la defensa de los derechos civiles con métodos pacíficos, inspirándose en la figura de Mahatma Gandhi y en la teoría de la desobediencia civil de Henry David Thoreau. En el verano de 1963, encabezó una gigantesca marcha sobre Washington donde pronunció uno de los más bellos discursos por la paz y la igualdad entre los seres humanos: “yo tengo un sueño”. Influyó para que se extendiera por todo el país la conciencia pública sobre el movimiento de los derechos civiles.
Siguiendo los pasos de Gandhi, King creyó firmemente en la paz y en la no violencia en contra de la opinión de muchos de sus seguidores. Con buena oratoria y con respuestas políticas se opuso en contra de la guerra. Sin embargo afirmaba que «cada uno tiene la responsabilidad moral de desobedecer las leyes injustas».
“La violencia crea más problemas sociales que los que resuelve”. Por ello, Luter King prefería prefería la disciplina de la desobediencia civil, que definía no solamente como un derecho sino también como un homenaje a una energía democrática no explotada. Ante la pobreza, pidió a los militantes "utilizar todo el poder de la no violencia para el problema económico". La opinión pública le dio la espalda. Decían que era un agitador y que utilizaba la desobediencia civil. Rechazaba los mandatos de la ley. Premio Nobel de la Paz en 1964, fue asesinado en 1968 cuando tenía 39 años y ya era una figura dominante en Estados Unidos y en el panorama mundial. Fue mejor conocido como un líder de los derechos civiles.
De su pensamiento recordamos que “hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos”. “Nuestra generación no se habrá lamentado tanto de los crímenes de los perversos, como del estremecedor silencio de los bondadosos”

Madre Teresa de Calcuta (1910-1997)
Para la religiosa Teresa de Calcuta, la violencia estaba en la pobreza y en el desamparo. Por ello, desde la fe y la caridad cristiana, se decició en 1947 a trabajar por los más pobres, consciente de que Dios la necesitaba: “ven y sé mi luz. No puedo ir solo”. Jesús le reveló su dolor por el olvido de los pobres y Teresa se sintió llamada por Dios, por lo que más tarde definió como “la llamada de la llamada”
Su respuesta a la violencia fue de amor y servicio a los más pobres: “nuestra misión es cuidar de los hambrientos, los desnudos, los sin hogar, los lisiados, los leprosos, toda esa gente que se siente indeseada, rechazada, sin cariño, para traerlos de vuelta a la sociedad, a esa sociedad para la que se han vuelto una carga y los evita". Por más de cuarenta años sirvió a los más desheredados de la tierra, fundó y también guió a las Misioneras de la caridad en diversos países del mundo hasta pocos meses antes de su muerte. Su oposición contra la violencia se extendió al aborto y a la eutanasia. Pacíficamente luchó en consonancia con la doctrina de la Iglesia. Su pensamiento era claro y rotundo: “el aborto mata la paz del mundo... Es el peor enemigo de la paz, porque si una madre es capaz de destruir a su propio hijo, ¿qué me impide matarte? ¿Qué te impide matarme? Ya no queda ningún impedimento” “La vida de cada ser humano, como que ha sido creación de Dios, es sagrada y de infinito valor, porque El nos ha creado a todos nosotros, incluso al niño recién concebido. La imagen de Dios está en ese niño que aún no ha nacido. Por eso, pienso que aquellas naciones que destruyen la vida legalizando el aborto son las más pobres, porque temen alimentar a un niño más y, por eso, agregan un cruel asesinato más a este mundo”.
Madre Teresa abrió casas en casi todos los países comunistas, incluyendo la antigua Unión Soviética y Albania. En el año 1986 logró llegar a Cuba, donde fue entrevistada por Fidel Castro y allí mismo consiguió su orden para fundar, a pesar de haber afirmado que no había visto pobres en la isla.
Para la década del 70, ya era conocida internacionalmente teniendo gran fama humanitaria y considerada como defensora de los pobres e indefensos. Ella ha sido elogiada por diferentes gobiernos, organizaciones y personas famosas. Por su mensaje de paz y humildad, se relacionó con toda clase de personas, creyentes o no, ciudadanos o políticos, oprimidos o personas causantes de la violencia.
En 1979 recibió el Premio Nóbel de la Paz. Poco tiempo después de su muerte (1997), la Santa de las Cloacas, fue beatificada en 2003 por Juan Pablo II.
Dada la respuesta que Teresa de Calcuta dio a la violencia en la pobreza, aborto y eutanasia, se comprende bien su pensamiento centrado en el amor cristiano.
"No basta con que digamos: Yo amo a Dios pero no amo a mi prójimo . San Juan dice que somos mentirosos si afirmamos que amamos a Dios y no amamos a nuestro prójimo”. “Es muy importante para nosotros darse cuenta de que el amor para que sea auténtico tiene que doler.". “Dios ama todavía al mundo y nos envía a ti y a mi para que seamos su amor y su compasión por los pobres”. "La paz y la guerra empiezan en el hogar. Si de verdad queremos que haya paz en el mundo, empecemos por amarnos unos a otros en el seno de nuestras propias familias”. “El que no sirve para servir, no sirve para vivir”. “Para que el amor sea verdadero, nos debe costar. Nos debe doler. Nos debe vaciar de nosotros mismos”.
Y ¿de dónde sacaba la fuerza esta débil religiosa para realizar tareas tan grandiosas? Ella lo confesó: “Jesús es mi Dios, Jesús es mi Esposo, Jesús es mi Vida, Jesús es mi único Amor, Jesús es todo mi ser, Jesús es mi todo”.. “Para poder amar hay que tener un corazón puro y rezar. El fruto de la oración es la profundización en la fe. El fruto de la fe es el amor. Y el fruto del amor es el servicio al prójimo. Esto nos trae la paz”.

Nelson Mandela (1918- ) Abogado, político y pacifista sudafricano, primer presidente de Sudáfrica (1994-1999), elegido por medios democráticos bajo sufragio universal. Es el símbolo de la lucha no violenta contra la segregación racial. En 1944 ingresó en el Congreso Nacional Africano (ANC), un movimiento de lucha contra la opresión de los negros sudafricanos. Nelson Mandela se convirtió en el líder de este movimiento promulgando los métodos de lucha no violentos.
En 1962 fue detenido y condenado a cinco años de reclusión y posteriormente a reclusión perpetua, Nelson Mandela pasó 27 años en prisión bajo penosas condiciones, convirtiéndose en un símbolo de la lucha contra el apartheid dentro y fuera del país, una figura legendaria que representaba la falta de libertad de todos los hombres negros. Mandela recibió más de 250 premios y reconocimientos internacionales durante cuatro décadas, incluido en 1993 el Premio Nóbel.de la Paz.
El pacifismo representa una doctrina y un movimiento partidario de la supresión de la guerra como medio para resolver conflictos. Dos son las variantes: el pacifismo absoluto, que se oponen a toda guerra y considera que la violencia engendra más violencia y el pacifismo relativo, que sólo admite el uso de la fuerza para la defensa contra amenazas extremas.
Por cierto, causa asombro que Nelson Mandela desde el poder no practicara el revanchismo. Por el contrario, neutralizó y controló a todos cuantos querían acabar con los blancos. Fue coherente con su pensamiento: “si quieres hacer las paces con tu enemigo, tienes que trabajar con tu enemigo. Entonces él se vuelve tu compañero”. “Porque ser libre no es solamente desamarrarse las propias cadenas, sino vivir en una forma que respete y mejore la libertad de los demás”.

¿Pueden relacionarse los pacíficos con los violentos? (fragm.) Urbano Sánchez García

Gandhi, King, Mandela y Teresa de Calcuta, las cuatro personas pacíficas y pacificadoras elegidas, poseían personalidades totalmente diferentes pero estaban unidas por objetivos comunes, la relación yo-tú estaba caracterizada por la violencia, compartían motivaciones muy parecidas y les unía una fuerza interior común humana o divina.

Qué pretendían El objetivo común de estos protagonistas consistía en superar la violencia restaurando la justicia. Ellos lucharon para que la utopía de la paz fuera una realidad. Sus esfuerzos iban dirigidos para que la vida se impusiera a la muerte, la libertad a la opresión, la justicia a las desigualdades, la paz a la opresión, el diálogo a la dictadura, la reconciliación a la división, el perdón al odio, el bien nacional e internacional al egoísmo de un grupo.

Con quiénes se tenían que relacionar
Se enfrentaron a los enemigos de la justicia, la libertad y la paz. Porque si la paz se entiende como un estado de tranquilidad, orden, sosiego, buena convivencia, unión, concordia, armonía, quietud, etc.; los defensores de los derechos humanos vivieron en una situación de conflictos, discriminaciones, pobreza extrema, agitaciones, disturbios, disensiones, riñas, peleas, pleitos,. la inseguridad, desunión y desorden.
Si la paz pide un trato justo sin ofensas, expresarse con libertad, sentirse aceptado, apreciado y amado, gozar de los derechos humanos más elementales, ellos, los amantes de una vida digna, sufrieron al comprobar cómo sus hermanos (o conciudadanos) no gozaban de un trato digno debido a la opresión, desigualdad, discriminación o desamparao en la enfemedad y en la pobreza. Los mismos protagonistas de la liberación sufrieron la violencia como acción injusta contra su libertad. La situación estructural de opresión propició la reacción violenta subversiva, sofocada por la autoridad con medios violentos. Sin embargo, nuestros protagonistas optaron por la no-violencia.

Qué les motivaba para enfrentarse a la “violencia de los violentos” Fundamentalmente, restablecer una vida digna para las personas de su Nación. Motivación básica que se manifestaba en el deseo de la realización de los derechos humanos relacionados con la justicia, la libertad, la vida-salud, la paz y la fraternidad-amor. Desde la ética, las motivaciones para vivir en paz personal y fraterna brotaron de los valores que este don encierra y de la fuerza que otorga para superar los obstáculos que encuentra. Y junto a las motivaciones humanas, están las religiosas, el influjo de la Palabra de Dios en general y del testimonio de Jesucristo en particular.

Cuáles fueron los recursos que emplearon
Al emprender su lucha contra la injusticia, la discriminación, el hambre o el desamparo del enfermo, eran conscientes del precio que tenían que pagar y las virtudes que eran necesario practicar. Eligieron el camino de la no-violencia pero no renunciaron a respuesta firmes realizadas con respeto, diálogo y amor. Ellos personalmente, cada uno según su personalidad, respondieron con energía de carácter que capacitaba la voluntad para no desistir ante el peligro, la adversidad o las dificultades de cualquier nivel.. Con mayor o menor éxito armonizaron el valor con la prudencia, la comprensión con la humildad, la protesta con el mínimo de heridas, el perdón y el olvido, el deseo de la paz con el espíritu franciscano de quien reza “Señor, hazme instrumento de tu paz”. En un caso, madre Teresa, el gran recurso fue la práctica de las «obras de misericordia». En todos, el espíritu de reconciliación, el perdón y amor a los enemigos
Queda un interrogante: ¿cómo respondieron a la violencia Gandhi, King, Mandela y Teresa de Calcuta?

lunes, 1 de agosto de 2011

Lo perdoné...

TEHERAN.- Durante siete años, la joven iraní Ameneh Bahrami estuvo consumida por el deseo de venganza. El pretendiente rechazado que arruinó su vida cuando tenía 26 años lanzándole ácido en la cara y dejándola casi ciega estaba condenado a sufrir un destino similar. Pero a último minuto, la víctima dio ayer marcha atrás.
"¿Qué quieres hacer ahora?", preguntó el médico a esta mujer iraní, que ahora tiene 32 años. "Lo perdoné", respondió ella, parada junto a su atacante en una sala de operaciones, en una dramática escena que fue transmitida ayer por la televisión estatal de Irán.
Así, bajo fuertes presiones internacionales, Bahrami renunció a la ley del Talión, con la que una víctima puede aplicarle a su atacante el mismo sufrimiento.
El brutal episodio sucedió en 2004, cuando la mujer y Mayid Mowahedi eran estudiantes en la Universidad de Teherán. Ella rechazó la propuesta de matrimonio de Mowahedi, quien, ante la negativa, respondió enfurecido, lanzándole ácido en la cara. La ley islámica permite el "ojo por ojo", por lo que Bahrami obtuvo el derecho en una sentencia de 2008 de cegar a su atacante con dos gotas de ácido. Pero a último momento, se echó atrás.
"Lo hice por varias razones: por Dios, por mi país y por mí misma", dijo ayer a la prensa local, y añadió que su propia familia estaba en contra del castigo. Además, aseguró que la decisión la ha liberado.
Desde que se conoció la sentencia, tanto Amnistía Internacional como otras organizaciones de derechos humanos iniciaron una campaña en su repudio. En medio de un revuelo mediático, en mayo pasado Bahrami se declaró dispuesta a aplicar la ley, aunque luego dijo que estaría dispuesta a renunciar a ello a cambio de dos millones de euros.
"Le doy gracias por su generosidad y me arrepiento en lo más profundo de mi horrible acto", fueron las palabras del atacante, entre lágrimas. La familia de Bahrami también se mostró aliviada. "Esto traerá más paz a mi hija que la venganza", dijo su padre.
El fiscal general de Teherán, Abbas Yafari Dolatabadi, dejó en claro que Mowahedi seguirá en prisión hasta que pague una indemnización, aunque no precisó de cuánto sería.
Bahrami insistió en que no ha recibido compensación alguna, alegando que su demanda de dos millones de euros la realizó solamente para poner de manifiesto que las organizaciones de derechos humanos no la ayudaron en ningún momento.
La joven anunció que hasta ahora pagó 150.000 euros para su tratamiento y dijo que exigirá por lo menos esa cantidad. Actualmente vive de la venta de su libro Ojo por ojo , así como del dinero que recibe por conceder entrevistas.
Reside en España, donde está bajo tratamiento médico. Pese a varias operaciones, perdió la visión de uno de sus ojos y casi la totalidad del otro. Los cirujanos que la atienden creen que necesitará por lo menos cinco operaciones para cambiar su aspecto. Además, necesitará otra cirugía más compleja para devolverle la vista en un ojo.
Consciente de la indignación que hubiese generado este castigo en el exterior, el gobierno de Mahmoud Ahmadinejad saludó la decisión de Bahrami. Aunque la joven lo negó, diversas fuentes coinciden en que el sistema judicial la presionó para negarse a cumplir la sentencia. Durante una visita a Nueva York el año pasado, el presidente iraní tuvo que hacer frente a duros cuestionamientos por la sentencia a muerte por lapidación contra Sakineh Ashtiani, una mujer hallada culpable por adulterio, caso que mereció el masivo repudio internacional.

Agencias AP, ANSA y EFE

No vamos a responder al mal con mal

"No vamos a responder al mal con mal, como hubieras querido. Estamos luchando contra el mal con el bien. Y vamos a ganar". Es parte del contenido de una carta escrita por un superviviente de la matanza de Utoya dirigida al autor confeso publicada este lunes. El inicio es el tradicional "Querido Anders Behring Breivik".

"Tal vez creés que has ganado. Mataste a mis amigos y pensás que destruiste al Partido Laborista y a quienes creen en una sociedad multicultural". Quien escribe es Benjamin Oesteboe, de 16 años, que perdió a cinco amigos en la matanza. "Que sepas que fracasaste", destaca el chico en el texto publicado en Facebook y difundido por el periódico noruego Dagbladet.

«Te describís como un héroe, un caballero. No lo sos. Pero una cosa es cierta: creaste héroes. En ese caluroso día de julio creaste algunos de los héroes más grandes que el mundo haya visto jamás», escribe Benjamin.

El pasado 22 de julio Benjamin Oesteboe se escondió junto a algunos amigos en la ribera del río al escuchar los disparos de Anders Breivik, que irrumpió en la isla de Utoya vestido con uniforme de policía.

"Lo llamamos agitando los brazos. Estaba allí tratando de tranquilizar a los que lo rodeaban. Pero de repente se giró y comenzó a disparar", relata el joven al periódico «Dagbladet».

Benjamin consiguió salvar su vida cuando alrededor de las 18.25, unos ochenta minutos después del comienzo del tiroteo llegó la policía. "Debés saber cómo funcionó tu plan. Sos el hombre más odiado de Noruega. Muchos están enfadados, pero yo no estoy enfadado. No tengo miedo. No podrás alcanzarnos, somos más grandes que vos», escribe Benjamin al final del texto.

El 22 de julio Breivik, que puede enfrentarse a una acusación de crímenes contra la humanidad, asesinó a 69 personas en la isla de Utoya, después de hacer explosionar un coche-bomba en Oslo, que acabó también con la vida de ocho personas.

Fuente: La Nación